El trastorno por consumo de alcohol (anteriormente conocido como alcoholismo) es una forma de trastorno por uso de sustancias. Los cambios en el cerebro dificultan la reducción o el cese del consumo de alcohol, pero el tratamiento puede ayudar.
El trastorno por consumo de alcohol (TCA) es una condición médica y de salud mental que implica la incapacidad de detener o reducir el consumo de alcohol a pesar de tener consecuencias negativas en la vida y el funcionamiento diario. El TCA puede afectar negativamente:
- las relaciones con amigos, familiares, compañeros de trabajo y conocidos
- el trabajo
- la escuela
- la salud física y mental
El trastorno por consumo de alcohol puede variar de leve a grave, dependiendo de los síntomas y el impacto.
Si tú (o un ser querido) estás experimentando trastorno por consumo de alcohol, sepas que hay ayuda disponible.
Sigues leyendo para aprender sobre el trastorno por consumo de alcohol, incluidos los síntomas y criterios, posibles causas y factores contribuyentes, y cómo obtener ayuda.
¿Por qué ya no se utilizan los términos “abuso de alcohol” y “alcoholismo”?
El trastorno por consumo de alcohol ha sido conocido por una variedad de términos, incluyendo abuso de alcohol y alcoholismo. Hoy en día, se le denomina trastorno por consumo de alcohol.
Los términos obsoletos pueden contribuir al estigma y al juicio, e implican que es una elección que una persona está haciendo. Aunque el uso de una sustancia puede ser voluntario al principio, el trastorno por uso de sustancias puede deteriorar el juicio de una persona, la toma de decisiones, la memoria y el control del comportamiento con el tiempo.
El trastorno por consumo de alcohol es una condición médica y de salud mental con causas y factores de riesgo identificables. El cambio en la terminología refleja esto. Al igual que muchas otras condiciones de salud, el trastorno por uso de sustancias interrumpe el funcionamiento habitual de los órganos en el cuerpo, tiene efectos nocivos serios, y puede ser prevenible y tratable.
El consumo de alcohol, incluyendo el consumo excesivo o habitual, no necesariamente es un trastorno por consumo de alcohol.
Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, 5ª edición, revisión del texto (DSM-5-TR), para recibir un diagnóstico de trastorno por consumo de alcohol, una persona debe tener al menos dos de los siguientes síntomas en un plazo de 12 meses:
- Consumir alcohol en cantidades mayores o durante un período más largo del que se pretendía
- Tener un deseo persistente o hacer esfuerzos infructuosos para reducir o controlar el consumo de alcohol
- Pasar “mucho tiempo” en actividades necesarias para obtener alcohol, consumir alcohol o recuperarse de sus efectos
- Ansia de alcohol, o tener un fuerte impulso de consumir alcohol
- Consumo repetido de alcohol que resulta en el incumplimiento de obligaciones importantes en el trabajo, la escuela o el hogar
- Continuar el consumo de alcohol a pesar de problemas sociales o de relaciones persistentes o recurrentes causados o exacerbados por sus efectos
- Abandonar o reducir actividades sociales, ocupacionales o recreativas importantes debido al consumo de alcohol
- Usar alcohol repetidamente en situaciones en las que es físicamente peligroso
- Continuar usando alcohol a pesar de tener conocimiento de un problema físico o psicológico persistente o recurrente que probablemente haya sido causado o empeorado por el alcohol
- Tener tolerancia al alcohol, lo que significa tener ya sea:
- Una necesidad de cantidades significativamente mayores de alcohol para lograr la intoxicación o el efecto deseado
- Un efecto significativamente disminuido con el uso continuado de la misma cantidad de alcohol
- Experimentar abstinencia, que puede incluir ya sea:
- Experimentar el síndrome de abstinencia alcohólica
- Usar alcohol (o una sustancia estrechamente relacionada, como una benzodiazepina) para aliviar o evitar los síntomas de abstinencia
El número de síntomas que tengas determina la gravedad:
- Leve: 2 a 3 síntomas
- Moderado: 4 a 5
- Grave: 6 o más
El trastorno por consumo de alcohol típicamente se desarrolla en etapas. Estas
- Etapa 1 o etapa de atracón/intoxicación: Durante esta etapa, el cerebro comienza a asociar la experiencia placentera y gratificante del alcohol con señales. Esto desarrolla y fortalece el consumo de alcohol como un hábito.
- Etapa 2 o etapa de abstinencia/efecto negativo: Durante esta etapa, la persona siente que necesita consumir alcohol para aliviar el malestar y el dolor emocional.
- Etapa 3 o etapa de preocupación/anticipación: Durante esta etapa, una persona desarrolla déficits en su funcionamiento ejecutivo, que es la parte del cerebro responsable del juicio y la toma de decisiones.
El trastorno por consumo de alcohol se desarrolla con el tiempo a partir del consumo habitual de alcohol.
El consumo habitual de alcohol provoca cambios en el cerebro que pueden dificultar dejar el consumo regular de alcohol.
Algunos factores pueden aumentar el riesgo de desarrollar trastorno por consumo de alcohol. Estos pueden incluir:
- edad temprana al primer consumo de alcohol
- historia de trauma, incluyendo abuso físico, sexual o emocional
- condiciones de salud mental, incluyendo ansiedad y depresión
- estrés crónico
- historia familiar de abuso de sustancias o trastorno por uso de sustancias, especialmente en un progenitor
- genética
- historia de uso de otras sustancias
- soledad y duelo
- participación en el consumo excesivo de alcohol
¿Qué es el consumo excesivo de alcohol?Los Institutos Nacionales de Salud (NIH) definen el consumo excesivo de alcohol como un patrón de consumo de alcohol que eleva la concentración de alcohol en sangre (BAC) a
0.08% (o 0.08 gramos de alcohol por decilitro) o más. Esto generalmente corresponde a beber en dos horas o menos:
- 5 o más bebidas para hombres
- 4 o más bebidas para mujeres
El umbral es más bajo en mujeres porque típicamente tienen proporcionalmente menos agua en sus cuerpos. No hay datos disponibles para determinar el BAC en personas fuera del binario de género.
El consumo de alcohol, especialmente el consumo habitual y excesivo asociado con el trastorno por consumo de alcohol, puede tener efectos negativos para la salud.
Las posibles complicaciones pueden incluir:
- síntomas de abstinencia al no beber, incluyendo temblores, náuseas y vómitos
- temblores (sacudidas involuntarias) la mañana después de beber
- lagunas en la memoria (desmayos) o demencia relacionada con el alcohol
- daño hepático inducido por el alcohol, incluyendo hepatitis o cirrosis
- cetoacidosis relacionada con el alcohol, que afecta la capacidad del cuerpo para producir insulina
- osteoporosis
- cáncer
- disfunción eréctil
- pancreatitis, o inflamación del páncreas
- lesiones traumáticas relacionadas con el consumo de alcohol
A veces puede ser difícil encontrar la línea entre el uso y el abuso del alcohol. Las siguientes preguntas pueden ser útiles para considerar tu relación con el consumo de alcohol.
- ¿Necesitas beber cada vez más con el tiempo para sentir los efectos del alcohol?
- ¿Sientes culpa por tus hábitos de consumo de alcohol?
- ¿Te vuelves irritable o violento cuando bebes?
- ¿Tienes problemas en la escuela o el trabajo debido al consumo de alcohol?
- ¿Crees que serías mejor si redujera tu consumo de alcohol?
Si deseas reducir tu consumo de alcohol pero no estás seguro de por dónde empezar, es mejor hablar con un profesional de la salud. El consumo habitual y excesivo de alcohol puede aumentar la probabilidad de experimentar síntomas de abstinencia si dejas de beber de repente. Algunos de estos síntomas pueden ser peligrosos. Un médico puede ayudar a evaluar tu situación y recomendar un tratamiento para reducir estos síntomas.
¿Qué es el consumo excesivo de alcohol?Los
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) definen el consumo excesivo de alcohol como:
- más de ocho bebidas por semana para mujeres
- más de 15 bebidas por semana para hombres
La Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA) define el uso excesivo de alcohol como el consumo excesivo de alcohol en
cinco o más días en el último mes.
No necesitas un diagnóstico profesional para obtener ayuda por el trastorno por consumo de alcohol.
Sin embargo, un diagnóstico de trastorno por consumo de alcohol puede proporcionar acceso a recursos adicionales para apoyar tu recuperación y cuidado, que pueden incluir:
- apoyo para reducir o detener el consumo de alcohol
- tratamiento médico para el síndrome de abstinencia de alcohol, si es necesario
- monitoreo de tu salud general
- tratamiento para condiciones de salud relacionadas con el alcohol
Un profesional de la salud puede utilizar un cuestionario que evalúe el trastorno por consumo de alcohol para ayudar a diagnosticarlo.
Típicamente, un diagnóstico de trastorno por consumo de alcohol no requiere una prueba diagnóstica. Sin embargo, un médico puede ordenar análisis de sangre para verificar la función hepática si presentas síntomas de enfermedad hepática.
El tratamiento para el trastorno por consumo de alcohol generalmente involucra apoyo y atención médica para ayudarle a reducir tu ingesta de alcohol o dejar de beber por completo.
El tratamiento puede ocurrir en etapas e incluir:
- Desintoxicación: Esto implica dejar de consumir alcohol y tomar medidas para prevenir o manejar el síndrome de abstinencia, si es necesario. Generalmente se recomienda completar la desintoxicación de alcohol bajo supervisión médica.
- Medicamentos: Los medicamentos pueden limitar los efectos placenteros y gratificantes del alcohol para ayudarle a reducir tu consumo.
- Tratamiento conductual: Grupos de apoyo y programas de 12 pasos como Alcohólicos Anónimos (AA) pueden apoyar y reforzar tu recuperación del trastorno por consumo de alcohol.
- Tratamiento médico: Los médicos ayudan a tratar problemas de salud asociados con el trastorno por consumo de alcohol.
- Terapia o consejería: La terapia de conversación, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) para la adicción, puede ayudarte a comprender y abordar cualquier problema emocional o histórico que pueda contribuir al desarrollo del trastorno por consumo de alcohol.
Los medicamentos para el trastorno por consumo de alcohol pueden incluir:
- naltrexona (ReVia), que bloquea ciertos receptores en el cerebro asociados con la respuesta placentera al consumir alcohol; en combinación con consejería, la naltrexona puede ayudar a disminuir el deseo de alcohol
- acamprosato, un medicamento que puede ayudar a restablecer el estado químico original del cerebro antes de la dependencia del alcohol
- disulfiram (Antabuse), un fármaco que causa malestar físico (como náuseas, vómitos y dolores de cabeza) cada vez que la persona consume alcohol
- topiramato (Topamax), un medicamento que puede ayudar a disminuir los efectos gratificantes del consumo de alcohol; sin embargo, este uso se considera uso fuera de etiqueta
Es posible que necesites buscar tratamiento en una instalación de internamiento si tu trastorno por consumo de alcohol es grave. Estas instalaciones proporcionan atención las 24 horas mientras te desintoxicas del alcohol.
Una vez que estés lo suficientemente bien para regresar a casa, generalmente continúas el tratamiento de manera ambulatoria.
La recuperación del trastorno por consumo de alcohol puede no ser lineal. Pero la ayuda está disponible.
Detener o reducir el consumo excesivo de alcohol de manera repentina y sin apoyo médico puede resultar en el síndrome de abstinencia. Es un conjunto de síntomas que se desarrollan cuando el sistema nervioso central intenta adaptarse a la falta de alcohol después de haberse habituado a él.
Los médicos pueden tratar el síndrome de abstinencia con medicación o cuidados de apoyo y monitoreo. Esto puede incluir medicamentos como benzodiazepinas o barbitúricos (uso no aprobado), que requieren un monitoreo cercano y reevaluación.
La abstinencia alcohólica puede causar síntomas que pueden incluir:
- ansiedad
- temblores
- náuseas y vómitos
- dolor de cabeza
- aumento de la frecuencia cardíaca
- irritabilidad y confusión
- insomnio
- presión arterial alta
- sudoración excesiva
Algunas personas pueden experimentar un tipo más grave de síndrome de abstinencia llamado delirium tremens (DT). Puede ser potencialmente mortal. Puede incluir formas más severas de los síntomas mencionados anteriormente, así como:
- fiebre
- convulsiones
- alucinaciones visuales, o ver imágenes que no existen
- alucinaciones táctiles, como tener una sensación de picazón, ardor o entumecimiento que no está ocurriendo
- alucinaciones auditivas, o escuchar sonidos que no existen
- respiración rápida
Si tienes un trastorno por consumo de alcohol, hay ayuda disponible. Los siguientes recursos pueden ayudarte a navegar en tu recuperación:
- Above the Influence proporciona información dirigida a jóvenes y adultos jóvenes sobre el uso de sustancias, la presión de grupo y las opciones de tratamiento.
- La Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA) ofrece recursos gratuitos y referencias a tratamientos. Si tiene preguntas o necesita ayuda, llame a la línea de ayuda 24/7 al 800-662-HELP (4357).
El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas proporciona información e investigación para adolescentes y adultos jóvenes sobre trastornos por uso de sustancias.- La Asociación Nacional para Niños de Alcohólicos proporciona información y recursos para hijos de padres con trastorno por consumo de alcohol.
- Al-Anon proporciona grupos y reuniones confidenciales en todo Estados Unidos para amigos adultos y familiares de personas que abusan del alcohol. Llame al 888-4AL-ANON (888-425-2666) para obtener más información sobre reuniones.
- Alateen proporciona grupos y reuniones confidenciales en todo Estados Unidos para ayudar a adolescentes y adultos jóvenes a lidiar con el consumo de alcohol de un amigo o familiar. Pruebe el chat de Alateen.
- Alcohólicos Anónimos (AA) ofrece reuniones presenciales y virtuales y grupos de apoyo para personas en recuperación de la adicción o abuso de alcohol.
- Narcóticos Anónimos (NA) ofrece reuniones presenciales y virtuales y grupos de apoyo para personas en recuperación de la adicción o abuso de narcóticos.
El trastorno por consumo de alcohol es una condición médica. El uso habitual y excesivo de alcohol de manera continua puede dificultar su manejo, reducción o cese.
Muchos factores pueden contribuir al desarrollo del trastorno por consumo de alcohol en una persona.
El tratamiento puede incluir desintoxicación médica, medicamentos, cuidados de apoyo y asesoramiento para ayudarle a dejar el consumo de alcohol. Si estás experimentando un trastorno por consumo de alcohol, hay ayuda disponible.